Ecos en bermellón/Manuela R. Fernández [+]
ISBN-978-987-4044-01-3
Escribir es enmendar un indicio junto con la certidumbre de que una palabra, un nombre, determina un destino. Luego sólo se puede contar con la lengua particular materna, la cursiva que delimite y cerque un territorio inasible (solo cuando soñás/ se detiene el mundo), los cuatro márgenes donde ejercer la escritura y el cuerpo, la dilación, la delación (encuentra otro lugar/ desértico/ pero real). En un libro el autor tolera un retrato, un hecho pródigo y extraño, destinado sólo a la indagación secundaria de un lector que olvidará qué significó el orden familiar de un mundo. Aunque esté bien escrito. Aunque defina credos personales o se proponga formular alegatos.
Lo más sugestivo de Ecos en bermellón es que al igual que con ciertos recuerdos, está escrito en la inminencia o la cercanía del asombro. Los poemas no hacen sino recabar esa confluencia (y por una vez/ abro las manos/ sin miedo a perder nada). Quien lea estas páginas accederá a las iluminaciones fragmentarias con que Manuela R. Fernández rebatió la opacidad de las apariencias en algo verídico: si hay vida hay amor.